Descubrir el mundo de la Web 2.0 es una experiencia fascinante pero a la vez perturbadora y apabullante. Encontrar tal cantidad de recursos con tantas posibilidades crea de inmediato una sensación de incapacidad. ¿Por dónde empezar?; ¿cómo integrar las diferentes herramientas de tal manera que de verdad faciliten nuestro trabajo diario?; ¿nos ayudarán en el procesamiento más eficiente de la información?, ¿de verdad nos ayudarán a mejorar la calidad y la cantidad de nuestra productividad académica?; ¿podremos aplicar éstas herramientas a nuestra labor docente?. Estas son algunas de las dudas que surgen cuándo se descubre este mundo. Además, la gran cantidad de neologismos en lengua inglesa no permite comprender a cabalidad todos los conceptos de la Web 2.0.
¿Qué hacer pues ante un mundo interesante, que parece mostrar múltiples posibilidades de desarrollo académico y profesional ?. ¿Cómo afrontarlo?.
La respuesta es este blog. Si bien el blog tiene la desventaja de que las entradas se presentan en orden cronológico, también permite la creación de categorías y de organizar por orden alfabético las entradas. Algo interesante que he experimentado es que el blog no permite la escritura secuencial; la escritura necesariamente debe ser hipertextual y no secuencial y eso obliga a que el pensamiento fluya de igual manera, a la manera Web 2.0.
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